Leishmaniosis canina
La leishmaniosis canina es una enfermedad grave causada por un parásito llamado Leishmania. Aunque esta enfermedad es más común en zonas tropicales y subtropicales, también ha sido detectada en algunas áreas del sur de Europa y América del Norte. Los perros son el principal reservorio de la enfermedad, aunque también puede afectar a otros animales, incluyendo humanos.
¿Cómo se transmite y actúa la leishmaniosis?
La leishmaniosis se transmite a través de la picadura de insectos portadores del parásito, como flebótomos o mosquitos. Una vez que el parásito entra en el cuerpo del perro, se aloja en los macrófagos y comienza a multiplicarse. A medida que el parásito se multiplica, puede causar daño a los órganos internos y sistemas del cuerpo, incluyendo la piel, los ojos y el sistema inmunológico.
Mapa de la seroprevalencia de leishmania en perros de España.
La leishmaniosis es una enfermedad endémica en España, con especial incidencia en Andalucía.
Los síntomas de la leishmaniosis
Los síntomas de la leishmaniosis canina pueden variar, pero pueden incluir:
- Pérdida de peso
- Fatiga
- Fiebre
- Problemas de piel
- Problemas en los ojos
- Anemia
- Problemas para coagular la sangre
- Si no se trata a tiempo, la leishmaniosis puede conducir a la muerte.
Medidas de prevención ante la leishmaniosis
Afortunadamente, existe una vacuna para prevenir esta enfermedad. La vacuna se administra en dos dosis a los perros mayores de 12 semanas de edad, con una segunda dosis a los tres meses. Después de la vacunación, es importante seguir un plan de vacunación de refuerzo para mantener la protección de su perro.
La vacunación es especialmente importante para los perros que viven en áreas donde la leishmaniosis es común o para aquellos que viajan a dichas áreas, y aquí se incluye España que actualmente pasa por una ola de esta enfermedad. También es importante vacunar a cualquier perro que tenga un alto riesgo de contraer la enfermedad, como aquellos que tienen un sistema inmunológico debilitado o que han sido expuestos a otro perro infectado.
Además de vacunar a su perro, también hay medidas preventivas adicionales que puede tomar para proteger a su mascota de la leishmaniosis. Estas incluyen:
- Evite que su perro tenga contacto con insectos portadores del parásito, como flebótomos o mosquitos.
- Utilice repelentes de insectos y coloque mosquiteros en ventanas y puertas.
- Mantenga a su perro dentro de casa durante los meses de verano, cuando los insectos portadores son más comunes.
- Mantenga a su perro en una dieta equilibrada y saludable para fortalecer su sistema inmunológico.
- Use ropa protectora y repelentes de insectos cuando salga con su perro a áreas donde los insectos portadores son comunes.
- Evite dejar alimentos fuera de casa, ya que esto puede atraer a insectos portadores.
Si sospecha que su perro puede tener leishmaniosis, es importante llevarlo al veterinario lo antes posible para un diagnóstico y tratamiento. El tratamiento de la leishmaniosis canina puede ser largo y costoso, pero es esencial para asegurar la recuperación y la supervivencia de su perro, y por ello lo más eficaz y económico es la prevención mediante la vacunación y su refuerzo.
Qué debes recordar sobre la Leishmaniosis canina.
La leishmaniosis canina es una enfermedad grave y potencialmente mortal que puede afectar a los perros y otros animales. Afortunadamente, existe una vacuna para prevenir esta enfermedad y hay medidas preventivas adicionales que puede tomar para proteger a su perro que le costarán menos tiempo y esfuerzo prevenir que curar. Si vive en una área donde la leishmaniosis es común o si su perro tiene un alto riesgo de contraer la enfermedad, consúltenos para protegerlo con las medidas preventivas mas adecuado. Y si sospechas que su perro puede tener leishmaniosis, pide cita con nosotros lo antes posible para un diagnóstico y tratamiento.